Como primera entrada para inaugurar el blog qué mejor manera que empezar con una buena obra ayudando a las aves con las que compartimos nuestro día a día.
Ahora que acaba de comenzar el verano y siendo cada año más caluroso que el anterior, las aves pasan por una época dura en la que se complica las posibilidades de encontrar alimento y sobre todo, agua, el recurso más necesario.
¿Podemos ayudar a nuestras vecinas aladas de alguna manera? Claro que sí, colocando en nuestra terraza o patio cualquier recipiente que permita a estos pequeños animales beber y refrescarse para hacer frente a estas temperaturas estivales, siendo las mejores opciones las macetas o platos de barro, o cualquier otro material que les permita poder entrar y salir fácilmente sin resbalar. No hace falta que sea demasiado profundo, con dos o tres dedos de agua sería suficiente, y si no se tiene a mano alguno de estos recipientes, cualquier otro material puede ser igual de válido, aunque hay que tener en cuenta ciertas precauciones y colocar alguna rama o piedras que puedan facilitarles el posadero a las aves más pequeñas que se acerquen hasta nuestra pequeña fuente de agua y no caigan en una trampa de la que no puedan salir.
Una vez tenemos ya nuestro pequeño "chiringuito de verano para pájaros" debemos limpiarlo a diario y renovar el agua, de poco o nada sirve tener un plato de agua sucia y caliente, ya que puede generar un ambiente perfecto para que críen los mosquitos o provocar que los animales que beban del agua estancada contraigan enfermedades.
Con esta rápida medida podemos ayudar a muchas aves que encuentran en nuestro recipiente un acceso al agua imprescindible en estos momentos de calor. Así nos llevaremos a casa la satisfacción de que con un pequeño gesto insignificante para nosotros hemos podido hacer mas llevadero el verano, y quien sabe si salvar alguna vida, de los pequeños animales que visitan a diario nuestro bebedero casero a disfrutar de la tan necesaria agua.
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